
No busco milagros
No busco en el cielo milagros,
los he sentido en mis manos,
en algún discurso sorpresivo,
en lo puntual o intempestivo,
al cruzar la calle, al sonreír,
al amar, al respirar, al vivir,
nunca busco milagros,
llegan sin llamarlos
poesía y versos libres
No busco en el cielo milagros,
los he sentido en mis manos,
en algún discurso sorpresivo,
en lo puntual o intempestivo,
al cruzar la calle, al sonreír,
al amar, al respirar, al vivir,
nunca busco milagros,
llegan sin llamarlos
Me gustan los copos de nieve,
porque pese a unas geometrías prescritas,
se visten en cada invierno de nuevas formas y aristas,
no precisan ser silueta homogénea y sinuosa,
ni se ciñen a un estándar de belleza presuntuosa,
me gustan los copos de nieve,
porque no anhelan ser otra cosa más que nieve